febrero 26th, 2016 by V & A

Por: Venus

Nunca en mi adolescencia, entendí la importancia del concepto o de las palabras… hasta que atendí una clase de filosofía en la universidad que me encantaba, no solo porque el profesor embrujaba con su forma de hablar y con su dialéctica impecable, bien estructura y erudita que incluso me excitaba tremendamente, sino que también fue él quien me hizo amar las letras, las palabras y los textos. Él, me puso a la tarea leer hasta muy tarde, sendos libros de filosofía y de política por lo demás bastante densos y también fue él, con quien rompí mis paradigmas logrando que resultara saliendo con un docente… (hasta ahí el chisme, tal vez haya un relato algún día)

En estos días he estado pensando muchísimo en las palabras con las cuales nos definimos sexual y eróticamente….y es que elaboramos unos vocablos sabrosisimos en nuestro argot popular!, que más que características son en sí todo un concepto, casi que describen toda una personalidad, con sus virtudes y su lado oscuro y aunque no falta el que condene algunos de estos vocablos, también es cierto que el lenguaje evoluciona y que al igual que la tecnología, no podemos negarnos a ciertos avances y a nuevas maneras de interactuar con el mundo. En el erotismo eso si que es cierto, hemos pasado de las llamadas calientes a los chats con emoticones de besitos y frasecillas muy elaboradas y pensadas que nos hacen morder los labios cada vez que vemos el “escribiendo…” en el encabezado del whatsapp, coquetear en el chat tiene sus ventajas porque tus reacciones físicas son invisibles al receptor del mensaje y viceversa. A veces son precisamente esos dioses los que me gustan, porque valoran la inteligencia más que la belleza, me siento como en una partida de Batalla Naval Sexual en donde los barquitos son precisamente esas … las palabras.

Ya en Palabras y frases sucias que nos desdoblan Afrodita y la suscrita nos despachamos discutiendo algunos de estos conceptos con ocasión de la polémica con los esmaltes de Masgloo, la palabra tiene poder es cierto, pero también debemos procurar que ese poder se convierta en algo positivo y más con estas palabras que llenan nuestro lenguaje urbano y que ya no podemos evadir en nuestras conversaciones cotidianas…veamoslas por el lado amable, esto no se trata de ofender!

Horny, (Cachonda en español de españa) , esta palabra para mi suena a miel (honey: Miel en inglés), también tiene una semblanza fonética directa a un “horno” caliente en donde se hornea un exquisito pan (o un manjar sexual). No podemos entonces negar que aunque sea un anglicismo (repudiado por algunos) suena muchísimo mejor que decir “estoy exitada!” con las implicaciones que tiene ese desliz que pueden tener algunas al pronunciar “esitada” y entonces sonar como una damisela poco experimentada en temas amatorios y con poco que aportar en temas eróticos. Horny es erotismo puro, es el preámbulo de la calentura incontrolable que nos sonroja y que nos hace poner dispuestas , arriesgadas y sexys.

Morrongo (a), Otra palabreja sonora y deliciosa porque esa “rr” al alargarla en su pronunciación da un matiz supremo de reafirmación en el concepto, con un efecto vibratorio que nos pone expectantes.  Esta es mi favorita para definir a aquellos que hacen sus travesuras con carita de yo no fui, como un minino que hace un daño y luego viene a ronronear en su actitud mas lambona,  también rememora a esa poesía infantil de antaño de Rafael Pombo cuya protagonista es de hecho una gata y que reza: (1)

Mirringa Mirronga, la gata candonga

va a dar un convite jugando escondite,

y quiere que todos los gatos y gatas

no almuercen ratones ni cenen con ratas.

Pues bien, al parecer para los caribeños (Cuba y Puerto Rico) la connotación es diferente y corresponde a un pene de gran tamaño (2), en tal sentido, solo se utiliza en género femenino para referirse a atributos varoniles por esas latitudes.

He caído en la tentación de incluso llegar a decir que alguien anda morronguiando, tengo una manía a verbalizar estos vocablos a centrarme en la acción más que en el individuo, así que, al preguntarle a un amigo del cual tengo conocimiento que es infiel “y entonces? Este fin de semana estuvo morronguiando?” ya es un resumen de todas las actividades y actitudes que asumió frente a su cónyuge para que no levantar sospechas respecto a sus andanzas .

Imagen1

Podríamos pensar entonces que la morronga que no esta en ereccion se está haciendo la morronga?

Zungo (a) Me saboreó pronunciando esta palabra porque para mi tiene una connotación de libertinaje excelsa, en este caso el valor fonético se lo lleva la Z inicial y entre más fuerte se pronuncie esta letra es porque a quien se refiere es más descarado en su actividad de buscarse placer y llevar a cabo sus conquistas sin ningún reparo, incluso el adjetivo de cantidad “mucho” la condimenta muy bien siendo “Mucha Zuuuunga!” una exclamación que provoca sentimientos muy divertidos.

Tampoco me resisto a la tentación de verbalizarla y esto me permite sin mayores explicaciones declarar que voy a salir con un dios o de sexy fiesta afirmando ”Ese dia no puedo porque me voy a zunguiar!”

Pues como la ven ? zunga, para nuestros amigos latinoamericanos del cono sur es: un slip de baño, tanga masculina, un bañador o traje de baño masculino apegado al cuerpo (2). Osea, lo que en Colombia denominamos tanga narizona, extraño no!. Para nosotros zunga es una palabra que ya esta intrincada en nuestra cultura urbana como sinónimo de puta; aquella mujer entrometida que mediante estrategias que implican la autopropaganda desmedida (buscona) se inmiscuye con un hombre ajeno… A mi me viene más pensar en ser esa prenda que envuelve la anatomía masculina pero dejándolo ser libre.

Ñoño, la menos divertida en su significado pero auditivamente igualmente jocosa, para el español la Ñ es de un gran valor y con solo decir “nooo ese es muy ñoño” ya se sentencia que con aquel no habrá posibilidades de nada en el terreno sexual… bueno a veces juzgamos sin saber y los que aparentan ser más ñoños resultan ser tremendos morrongos, hasta zungos.

Recordemos al personaje de la aclamadisima comedia el chavo del 8 con ese nombre, él era un protegido de sus padres que guardaba distancia con los niños de la vecindad, símil que describe a aquel que no prueba nada nuevo en ningún ámbito de su vida especialmente en el plano erótico, sigue los parámetros y se niega a los placeres de la carne, eso de “la carne es débil” no aplica para el ñoño y seguramente son expertos en el misionero al cual le agradecen que no deban gozar de creatividad para el acto sexual que se limita a la procreación y preservación de la especie, aburrimiento en su estado más puro.

Coger, agarrar es su significado primigenio, y es que no hay nada mejor que asir a nuestra pareja sexual incluso estrujarla, como apropiarla para que se entregue al repertorio de un en encuentro sexual y cuando el asunto se pone más excitante esa acción de agarrarse para sincronizar ritmos y potencias es de lo mejor.

En América latina coger es realizar el acto sexual mientras que los españoles desarrollaron su famoso follar dejando el coger en simplemente llevar algo o a alguien consigo a un lugar diferente, un dios que sabe follar te coge y te lleva al Olimpo …uyyy ya estoy horny!

No me odien, pero yo si en este caso les envidio el follar a los españoles porque suena como a revolcada de esas que lo deja a uno totalmente despelucado, satisfecho y caliente buscando un “fuelle” para darse un poco de aire.

Bandido(a), muero de diversión cuando al contar de mis actitudes coquetas Vulcanó la pronuncia diciendo “ahhh Bandidilla!”, me encanta ser la que elabora el plan del filtreo develando poco a poco la estrategia para dar el asalto final luego, como ese malvado criminal que observa cómo sus células delictivas, en este caso, armas de seducción, van avanzando hacia el botín y es que ser bandida tiene lo suyo siempre y cuando y volviendo a Rafael Pombo no termine uno como Michin (El gato bandido) por quererselas dar de malo…(1)

...ve otro gato, y da el asalto

‘¡Tocayito, haga usted alto!

¡Déme la bolsa o la vida!’

El otro no se intimida

y antes grita: ‘¡Alto el ladrón!’

Tira el pillo, hace explosión

el arma por la culata,

y casi se desbarata

Michín de la contusión.

Por eso el asalto debe ser silencioso y bien planificado para que la víctima reaccione bien y también tenga la oportunidad de mostrar sus propias dotes criminales para que el juego erótico se ponga realmente interesante y darse la oportunidad de propinarse el gran golpe que nos robara todo el aliento y desfalleciendo.

Rico, rica.. ricura, todos los tipos de alimentos pueden ser calificados con este adjetivo, pero en una charla erótica el alimento deleita otros sentidos , es excitante pensar en un acto sexual como una especie de cena en donde cada cual se come al otro proporcionando placer al tiempo que se lo procura a la contraparte, saborearse de a pocos y descubriendo la mejor forma de degustarse, cuando en un sexting recibo un “rica” mi  ego erotico se eleva e inmediatamente pienso en ser una buena chef para el próximo encuentro con el dios que dictamina semejante sentencia, recordemos a nuestra diva porno Esperanza Gomez que hizo célebre la frase “que rico !! ….(groseria)!” al exclamarla en sus faenas y es que lo rico es rico y debe consumirse, porque al contrario de los postres y dulces el arrepentimiento vendrá por no haberse dejado seducir no por haber sucumbido al deleite sexual.

Se que quedan muchas palabras, pero seamos realistas, se que no tienen tiempo para leer todo un diccionario de términos sexieróticos, entonces dejemoslos en el tintero y si les interesa saber mi opinión sobre alguno en particular anímense y dejen un comentario prometo hacer mi mejor esfuerzo y dejarlos con una sonrisa en los labios como si estuvieran muyyyyy horny.

Para quienes están siguiendo el relato de Saturno pronto se publicará la continuacion, estén pendientes porque se pone mejor y muy emotivo.

Venus

Referencias

(1)Literatura de rafael Pombo de la página http://rafaelpombo.co/

(2)Acepciones latinomericanas de http://www.asihablamos.com/

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